En muchos casos no es necesario inventar nuevos ideogramas, ya que muchos se encuentran ya - con su significado convencionalmente establecido - en la vida cotidiana. Sin embargo, es posible que el diseñador experto quiera crear una nueva colección, dándoles un "toque" estilístico personal, como en este ejemplo que corresponde a grandes almacenes de la antigua RDA.
En otros casos bastará con adaptar figuras clásicas del "código visual" popular ...
... o recurrir a los códigos ya establecidos por diversas disciplinas, como la arquitectura
o la cartografía, códigos que el grafista ha de investigar antes de realizar una creación propia.