Estereoscopía
La fotografía 3D intenta reproducir la sensación de profundidad de la visión estereoscópica natural. Si obtenemos dos fotografías con una separación adecuada, correspondientes a la visión que se obtendría con cada ojo, y se observan con un visor apropiado, es posible recrear la sensación de profundidad, de la cual carecen las fotografías convencionales.
Fue un físico escocés, Sir Charles Wheatstone, quién en Junio de 1838 describió primero con cierto rigor el fenómeno de la visión tridimensional y construyó luego un aparato con el que se podían apreciar en relieve dibujos geométricos: el Estereoscopio.
Años más tarde, en 1849, Sir David Brewster diseñó y construyó la primera cámara fotográfica estereoscópica, con la que obtuvo las primeras fotografías en relieve. Construyó también un visor con lentes para observarlas. Posteriormente, Oliver Wendell Holmes, en 1862, construyó otro modelo de estereoscopio de mano que se hizo muy popular a finales del siglo XIX. Con él podían verse en relieve fotografías estereoscópicas montadas sobre un cartón.
En la fotografía y cinematografía estereoscópica se manipula la distancia entre los objetivos para lograr mayor detalle, según la distancia de los objetos enfocados. En efecto, a mayor separación entre los lentes, mayor es la distancia a la que se capta el relieve. Así, por ejemplo, para la cartografía se toman fotos con 100 metros de separación, lo cual permite obtener una excelente apreciación del relieve, imposible a ojo desnudo. Al contrario, para obtener imágenes en relieve de objetos pequeños o microscópicos, se reduce la separación de los lentes.
Para una observación natural, la distancia entre los lentes ha de ser equivalente a la distancia entre los dos ojos. Ésto ha sido aplicado en las primeras cámaras estereográficas (fotografía fotoquímica), como la máquina Kodak (foto superior), que se vendieron hasta los años 1950 pero por las cuales el entusiasmo decayó rápidamente debido a las dificultades con que se encontraba el fotógrafo aficionado a la hora de visionar las imágenes.
La empresa ViewMaster fabricó una cámara estereográfica en los años 1930 y sus discos y visores estereoscópicos tuvieron amplio éxito hasta los años 1960.
Al lado, la nueva cámara digital estereográfica de Sony, presentada en el CES 2011.
Naturalmente, el sujeto no debe moverse entre las dos tomas, por lo cual este procedimiento sólo sirve para fotografiar objetos inmóviles. Si queremos obtener fotografías 3D en movimiento debemos emplear una cámara especial (con dos lentes), una cámara convencional dotada de un accesorio especial con espejos o bien dos cámaras disparadas simultáneamente.
Algunas cámaras normales (con lente único), para responder rápidamente a la actual moda ofrecen crear imágenes en 3D con una sola toma, recurriendo a un software pre-instalado que, en realidad, simula la tercera dimensión superponiendo dos veces el mismo original, con un leve desplazamiento lateral (Volveremos a hablar de este método).
Anáglifo: combinación de filtros verde y rojo para producir una imagen única Polarización electromagnética: se crean dos versiones de la imágen, polarizando la luz en dos ángulos diferentes y los correspondientes filtros polarizadores -en los lentes- bloquean el paso de luz polarizada a 90º respecto al plano polarizador del filtro.
Las empresas fabricantes de televisores trabajan hoy en el desarrollo de pantallas «autoestereoscópicos», que no requieren lentes especiales. Tienen claro que el mercado preferirá los televisores sin lentes y que éste es el camino para la industria futura de la televisión. Así, mientras Toshiba anuncia ya (diciembre 2010) un televisor 3D sin gafas, Apple tamnién ha adquirido una patente de televisión 3D sin necesidad de gafas, el que funcionaría mediante una cámara que detecta la posición de la cara de los espectadores y proyecta diferentes imágenes de tal modo que todos percibirían los diferentes efectos 3D.
Utilizando un software de edición, como Photoshop, a partir de una sola foto se pueden crear dos imágenes, como lo mostramos aquí, recortando la original hacia un lado y luego hacia el otro (la diferencia es poco notoria aquí, pero es capital):
Aplicando luego el 3D PhotoMaker, obtuvimos la siguiente imagen:
Otro ejemplo:
Este tipo de procedimiento es el que puede estar incorporado en la cámaras digitales que hoy ofrecen una función 3D sin contar con dos lentes.
Para hacerlo en el computador, calcular el desplazamiento adecuado puede ser difícil y conviene hacer varias pruebas.
Fue un físico escocés, Sir Charles Wheatstone, quién en Junio de 1838 describió primero con cierto rigor el fenómeno de la visión tridimensional y construyó luego un aparato con el que se podían apreciar en relieve dibujos geométricos: el Estereoscopio.
Años más tarde, en 1849, Sir David Brewster diseñó y construyó la primera cámara fotográfica estereoscópica, con la que obtuvo las primeras fotografías en relieve. Construyó también un visor con lentes para observarlas. Posteriormente, Oliver Wendell Holmes, en 1862, construyó otro modelo de estereoscopio de mano que se hizo muy popular a finales del siglo XIX. Con él podían verse en relieve fotografías estereoscópicas montadas sobre un cartón.
En la fotografía y cinematografía estereoscópica se manipula la distancia entre los objetivos para lograr mayor detalle, según la distancia de los objetos enfocados. En efecto, a mayor separación entre los lentes, mayor es la distancia a la que se capta el relieve. Así, por ejemplo, para la cartografía se toman fotos con 100 metros de separación, lo cual permite obtener una excelente apreciación del relieve, imposible a ojo desnudo. Al contrario, para obtener imágenes en relieve de objetos pequeños o microscópicos, se reduce la separación de los lentes.
Para una observación natural, la distancia entre los lentes ha de ser equivalente a la distancia entre los dos ojos. Ésto ha sido aplicado en las primeras cámaras estereográficas (fotografía fotoquímica), como la máquina Kodak (foto superior), que se vendieron hasta los años 1950 pero por las cuales el entusiasmo decayó rápidamente debido a las dificultades con que se encontraba el fotógrafo aficionado a la hora de visionar las imágenes.
La empresa ViewMaster fabricó una cámara estereográfica en los años 1930 y sus discos y visores estereoscópicos tuvieron amplio éxito hasta los años 1960.
Al lado, la nueva cámara digital estereográfica de Sony, presentada en el CES 2011.
La captura 3D hoy
Se pueden lograr fotografías 3D de diversas maneras. Con una sola cámara podemos obtener las dos imágenes, en dos tiempos, desplazando la cámara una distancia similar a la de separación de los ojos, unos 65 mm. En las siguientes fotos, se muestra el dispositivo Novoflex para tomas sucesivas con una misma cámara, perteneciente al autor y el dispositivo con las dos posiciones de la cámara. Un software especial "monta" después la imagen 3D (ver más abajo).Naturalmente, el sujeto no debe moverse entre las dos tomas, por lo cual este procedimiento sólo sirve para fotografiar objetos inmóviles. Si queremos obtener fotografías 3D en movimiento debemos emplear una cámara especial (con dos lentes), una cámara convencional dotada de un accesorio especial con espejos o bien dos cámaras disparadas simultáneamente.
Algunas cámaras normales (con lente único), para responder rápidamente a la actual moda ofrecen crear imágenes en 3D con una sola toma, recurriendo a un software pre-instalado que, en realidad, simula la tercera dimensión superponiendo dos veces el mismo original, con un leve desplazamiento lateral (Volveremos a hablar de este método).
La visualización
El principal problema es la forma de observar las fotografías, de manera que cada ojo vea solamente la imagen que le corresponde. Los visores o estereoscopios permiten una visión casi perfecta pero individual. Los sistemas empleados en la proyección de películas permiten ver imágenes tridimensionales a un grupo numeroso de personas, pero les obliga a portar gafas especiales. Éstas pueden ser de varios tipos, pero son dos los que hoy se disputan el mercado:Las empresas fabricantes de televisores trabajan hoy en el desarrollo de pantallas «autoestereoscópicos», que no requieren lentes especiales. Tienen claro que el mercado preferirá los televisores sin lentes y que éste es el camino para la industria futura de la televisión. Así, mientras Toshiba anuncia ya (diciembre 2010) un televisor 3D sin gafas, Apple tamnién ha adquirido una patente de televisión 3D sin necesidad de gafas, el que funcionaría mediante una cámara que detecta la posición de la cara de los espectadores y proyecta diferentes imágenes de tal modo que todos percibirían los diferentes efectos 3D.
Software para fotógrafos
Actualmente se puede descargar de la web la aplicación Free 3D PhotoMaker. Con ella, se han de abrir las dos fotografías originales (izquierda y derecha) para luego obtener el producto 3D. Es evidente que la mejor forma de hacerlo, es utilizando la cámara con un dispositivo como el Novoflex que hemos mostrado aquí, de lo contrario hay que desplazar un poco el trípode (siempre recomendable). Para apreciar bien la profundidad, es conveniente trabajar con escenas en que la variación de los planos es notoria. No es efectivo para los paisajes, a menos que se cuente con buenos primeros planos. Aquí un ejemplo donde la profundidad se nota particularmente bien (se requieren lentes anáglifos).Utilizando un software de edición, como Photoshop, a partir de una sola foto se pueden crear dos imágenes, como lo mostramos aquí, recortando la original hacia un lado y luego hacia el otro (la diferencia es poco notoria aquí, pero es capital):
Aplicando luego el 3D PhotoMaker, obtuvimos la siguiente imagen:
Otro ejemplo:
Este tipo de procedimiento es el que puede estar incorporado en la cámaras digitales que hoy ofrecen una función 3D sin contar con dos lentes.
Para hacerlo en el computador, calcular el desplazamiento adecuado puede ser difícil y conviene hacer varias pruebas.